El debate ético de la IA

Por Guadalupe Rodríguez Cobos

Estoy a punto de usar el ChatGPT4 para entregar mi colaboración de este blog, porque como

bien sabrán todos aquellos que escriben, la inspiración a veces viene y a veces se va. Y me pregunto si lo hiciera con Inteligencia Artificial (IA) ¿qué tan honesto sería, ¿quién firmaría el texto yo o la IA?

Ésta es sólo un cuestionamiento de muchos que empiezan a hacerse con el uso de la Inteligencia Artificial y aunque esto no es nuevo hoy se ha abierto el debate gracias a que la empresa OpenAI ha lanzado al mercado general el ChatGPT4, que de acuerdo a su página oficial en español es: un potente chatbot avanzado que puede comunicarse en hebreo y varios otros idiomas, permitiendo a los usuarios conversar sobre diversos temas y recibir respuestas casi humanas en segundos. Y como también lo describen se ha convertido en un fenómeno global.

Se ha abierto el debate de la ética de este super chatbot, y regresando a mi pregunta inicial, si uso el ChatGPT para realizar mi colaboración en este blog, en dónde queda mi pensamiento y mi forma de ver el mundo, sí posiblemente el chat “adivinará” mi forma de ver el mundo y con base en una gran cantidad de datos e información escribiría lo que yo quería decir, o quizás me convencería de que eso era lo que yo quería decir.

Pero no olvidemos que atrás de la Inteligencia Artificial sigue habiendo un gran grupo de personas y que incluso, la misma IA puede equivocarse o simplemente plagiar textos que al momento de que tú hagas copy&paste el plagiador eres tú.

Mi análisis principal no es la ética y seguridad de éste u otro chat de inteligencia artificial como Bind o Bard, sino la ética de aquellos que programan estas herramientas, el grupo de personas atrás de toda la inteligencia artificial.

¿Quién sería el responsable REAL del uso ético del ChatGPT-4? ¿Y los usuarios en qué nivel de responsabilidad de su uso estaríamos?

Ya sé que son muchas preguntas, pero la realidad es que no hay respuestas concretas todavía en este mundo de la tecnología y aunque son temas que se han estudiado y empezado a desarrollar desde hace mucho tiempo, en el caso de la Inteligencia Artificial se remonta al siglo pasado con el padre de la inteligencia artificial Alan Turing en la época de los años 30´s, apenas veremos los resultados del uso masivo que se les da…todavía estamos en espera de los resultados.

Y aunque el ChatGPT4 ya ha contestado a sus cuestionadores diciendo en un comunicado “…reitero mi compromiso con la seguridad y la ética en el uso de la inteligencia artificial”, la pregunta es ¿cómo lo garantiza? Lo garantiza el Chat y qué pasa con el ejército de personas atrás de la IA, ellos ¿qué nivel de responsabilidad asumen? Si no cumplen a quién se acusa al Chat, a la máquina, a sus desarrolladores o a los usuarios.

Si no cumplen a quién se acusa al Chat, a la máquina, a sus desarrolladores o a los usuarios.

Y si vamos a usar algún súper chatbot para nuestra vida cotidiana qué pasará con el proceso mental de nuestro cerebro ¿se apagará?

La idea de este blog era dejar en la mesa una serie de cuestionamientos sobre el tema y abrir el debate del uso ético no sólo de la IA sino de la tecnología en general.

Cada quien vayamos haciendo nuestras propias conclusiones y nuestras apuestas, y realmente espero que la creación de estas nuevas tecnologías sean para crear una mejor humanidad.